En un movimiento audaz destinado a liderar la transición hacia un futuro energético más sostenible, Iberdrola ha anunciado una inversión de 41.000 millones de euros durante el período 2024-2026. Esta inversión masiva se centra en dos áreas clave: el fortalecimiento de las redes eléctricas y la expansión de la energía eólica marina.

El plan de inversión de 41.000 millones de euros brutos incluye la compra del 18,4% de su filial estadounidense Avangrid y 5.000 millones de euros de inversiones con socios estratégicos. De esta forma, la compañía destina 36.000 millones de euros netos a la inversión. El 70% de su inversión estará focalizado en el crecimiento.

El presidente de Iberdrola, Ignacio Galán, enfatizó la imparable tendencia hacia la electrificación y la necesidad urgente de desarrollar infraestructuras adecuadas para satisfacer la creciente demanda de energía limpia. Galán declaró: "La electrificación es imparable. Las previsiones apuntan a que esta tendencia aumentará exponencialmente en los próximos años como única alternativa para dar respuesta a los retos actuales de la industria energética".

Crecimiento en redes y con una selectiva inversión en renovables

Del total de la inversión, el 60% se destinará al fortalecimiento y expansión de las redes eléctricas en mercados clave como Estados Unidos, Reino Unido, Brasil y España. Esto incluye una inversión significativa en redes de transporte de electricidad, que se espera que crezcan un 38% hasta alcanzar los 54.000 millones de euros para 2026.

Por países, la compañía centrará el 85% de las inversiones en regiones con alta calificación crediticia -rating A-. Estados Unidos se sitúa como el principal mercado de expansión para los próximos tres años, donde destina el 35% de sus inversiones. Por detrás se encuentra Reino Unido, con un 24%, seguido de España y Latinoamérica, donde destina un 15% a cada uno y el resto de países de la UE y Australia, con un 11%.

En cuanto a la energía renovable, más de la mitad de la inversión se dirigirá a la energía eólica marina, con proyectos planificados en Estados Unidos, Reino Unido, Francia y Alemania. Además, se espera que el almacenamiento de energía desempeñe un papel crucial en la estabilización del sistema energético, con una inversión de 1.500 millones de euros, lo que le permitirá alcanzar los 120 millones de kWh de capacidad de almacenamiento a través del bombeo,  suponiendo un incremento del 20%.

El sector de clientes representará 2.500 millones de euros, con el 70% - 80% de la energía vendida a largo plazo, principalmente a través de PPAs y generación regulada. Además, el 85% de las ventas con márgenes asegurados están garantizadas hasta 2026, alcanzando entre 140.000 y 150.000 GWh.

Liderando la transición social y energética

Estas inversiones no solo impulsarán la transición hacia una matriz energética más limpia, sino que también generarán empleo, con la creación de 10.000 puestos de trabajo en los próximos tres años. Además, Iberdrola reafirma su compromiso con la igualdad de género, con las mujeres ocupando el 34,5% de los puestos directivos.

Con esta estrategia de inversión ambiciosa y enfocada en la sostenibilidad, la compañía se posiciona como un líder global en la lucha contra el cambio climático y la promoción de un futuro energético más limpio y seguro para las generaciones venideras.