Según un informe reciente de la Agencia Internacional de Energía (IEA, por sus siglas en inglés) titulado "Avanzando en la Fabricación de Tecnologías Limpias", se revela que la inversión mundial en la producción de cinco tecnologías limpias energéticas clave —paneles solares fotovoltaicos, energía eólica, baterías, electrolizadores y bombas de calor— ha aumentado a $200 mil millones en 2023. Esto representa un notable aumento de más del 70% respecto a 2022 y contribuyó aproximadamente al 4% del crecimiento del PIB mundial. Esta tendencia de inversión en auge, especialmente en paneles solares fotovoltaicos y baterías, se destaca como un importante catalizador económico a nivel global, dando paso a nuevas oportunidades tanto en el desarrollo industrial como en la creación de empleo.

El año pasado presenció un importante aumento en el gasto en la fabricación de paneles solares fotovoltaicos, más que duplicando sus niveles anteriores, mientras que la inversión en la fabricación de baterías experimentó un sólido aumento de aproximadamente el 60%. Como consecuencia, la capacidad de fabricación actual de módulos solares fotovoltaicos ya se ajusta a los requisitos proyectados para 2030 bajo el escenario de emisiones netas cero de la IEA. En el caso de las celdas de batería, contabilizando los proyectos anunciados, la capacidad de fabricación alcanza el 90% del objetivo necesario para satisfacer la demanda neta cero para finales de esta década.

El informe identifica numerosos proyectos en curso que están a punto de ponerse en marcha. Es destacable que aproximadamente el 40% de las inversiones en fabricación de energía limpia en 2023 se destinaron a instalaciones que se espera que comiencen a operar en 2024. Esta proporción aumenta significativamente al 70% para la fabricación de baterías.

Actualmente, la fabricación de energía limpia está fuertemente concentrada en regiones específicas, con China, por ejemplo, albergando más del 80% de la capacidad de fabricación mundial de paneles solares fotovoltaicos. Sin embargo, según el informe, el panorama de la fabricación de celdas de batería podría experimentar un cambio hacia una menor concentración geográfica para finales de la década. Si todos los proyectos anunciados se materializan, Europa y Estados Unidos podrían representar aproximadamente el 15% de la capacidad instalada mundial para 2030.

Datos recientes y evaluaciones de más de 750 instalaciones a nivel de planta revelan que China sigue siendo el productor más rentable en todas las tecnologías de energía limpia. Las instalaciones de fabricación de baterías, energía eólica y paneles solares fotovoltaicos suelen ser de un 20% a un 30% más caras de establecer en India en comparación con China, y significativamente más caras en Estados Unidos y Europa, con aumentos de entre el 70% y el 130%. Sin embargo, los costos operativos, incluida la energía, la mano de obra y los materiales, constituyen la gran mayoría (del 70% al 98%) de los costos totales de producción para estas tecnologías. Esto implica que las disparidades existentes en los costos de producción no son fijas y pueden ser influenciadas por medidas políticas.

Encargado en respuesta a una solicitud de los líderes del G7 en 2023, el informe ofrece una orientación valiosa para los formuladores de políticas mientras elaboran estrategias industriales dirigidas a fortalecer la fabricación de energía limpia. Reconociendo la ausencia de una solución universal, el informe describe los principios clave para informar futuros esfuerzos de planificación.