En 2022 la industria eólica terrestre se vio afectada por la presión del margen de ganancias. Los mercados occidentales se enfrentaron a una tormenta perfecta de desafíos en la cadena de suministro y aumentos de capital. Los fabricantes chinos de equipos originales (OEMs, por sus siglas en inglés) de turbinas estaban protegidos por un mercado interno masivo y una cadena de suministro localizada.

De cara al 2023, según el director global de investigación de energía eólica terrestre de Wood Mackenzie, Aarón Barr, esos problemas persisten. Los fabricantes de aerogeneradores occidentales y sus proveedores se enfrentan a un año difícil, a pesar de los esfuerzos sostenidos por aumentar los precios a la luz de los desafíos de la cadena de suministro global. La industria eólica terrestre china ahora podría aprovechar su posición de bajo costo y economías de escala para acercarse a los mercados globales, amenazando la participación de mercado de los OEM arraigados.

Según el analista, el problema de la cadena de suministro de energía eólica terrestre continuará en 2023, pero también habrá un cambio de rentabilidad para los proveedores occidentales. “El 2022 fue nada menos que un año desastroso para la rentabilidad de la cadena de suministro eólica. Los fabricantes de equipos originales de turbinas eólicas occidentales más grandes acumularon miles de millones en pérdidas a lo largo del año, lo que llevó a muchos a cerrar fábricas, despedir empleados y aumentar los precios de los equipos de turbinas eólicas”, señala.

Así que, para él, las razones de estas luchas son multifacéticas, pero están relacionadas principalmente con problemas de la ya mencionada cadena de suministro, la inflación de las materias primas, los aumentos drásticos en los costos de logística especializada y una acumulación de contratos de suministro con precios desfavorables. Situación que persistirá, según las estimaciones de Wood Mackenzie, hasta la primera mitad de 2023.

Luz (verde) al final del túnel

Sin embargo, Barr explica que el sector espera ver un cambio en las ganancias y un camino hacia el crecimiento en 2023. “La claridad de las políticas en los EE. UU. sobre incentivos de contenido nacional debería conducir a una avalancha de nuevos pedidos de turbinas a principios de 2023. Permitir la aceleración en la UE también probablemente conducirá a un aumento significativo en los pedidos allí. Las restricciones de la cadena de suministro y la volatilidad de los precios de las materias primas, el principal obstáculo para la rentabilidad de los OEM, deberían disminuir en 2023”, sostiene.

Resalta que los PPA eólicos y los precios de las subastas aumentarán para reflejar el crecimiento del gasto de capital en energía eólica, los aumentos del costo de capital y la fuerte demanda. Además, el director global de investigación de energía eólica terrestre de Wood Mackenzie estima que los aumentos de Capex impulsarán los precios de la energía para los proyectos de energía eólica y las subastas con suscripciones insuficientes en Europa aumentarán los límites de precios.