El uso de la energía solar y otras fuentes renovables creció en 2021, de acuerdo con la Agencia Internacional de Energías Renovables (Irena), que informó que -durante este periodo- casi 257 GW de energías renovables (para un total de 3.064 GW) fueron incorporados a la matriz energética mundial, aumentando las reservas de energía renovable en 9,1 %. 

Tan solo la energía solar fue más de 50 % del aumento con una producción récord de 133 GW, le siguieron la energía eólica general, con 93 GW, y la energía eólica marina, con 21 GW, aunque la energía hidroeléctrica registró la cuota más elevada de la capacidad total de generación renovable, con 1.230 GW. Con esto, las energías renovables representaron 38 % de la capacidad instalada mundial a finales del pasado año.

En las Estadísticas de Capacidad Renovable 2022, registradas por Irena, se evidencia que las energías solar y eólica son predominantes en la nueva capacidad de generación pues ambas fueron en conjunto 88 % del total de la capacidad renovable nueva en 2021. De estas, la energía solar fue la primera, con un incremento de 19 %, seguida por 13 % de la energía eólica.

En palabras de Francesco La Camera, director general de Irena, plasmadas en el documento de Estadísticas de Capacidad Renovable, “la transición energética cobró impulso el año pasado, ya que los países continuaron cumpliendo la década de acción a través del despliegue de energías renovables; pero la tasa de crecimiento aún no es suficiente para garantizar un futuro neto cero. Las energías renovables deben alcanzar alrededor de 40 por ciento en la generación total de energía en todos los sectores para 2030.”

Para el ejecutivo, el rendimiento que registraron las renovables en 2021 “brinda nuevas oportunidades para que los países aprovechen los múltiples beneficios socioeconómicos de las renovables. Sin embargo, pese a que la tendencia mundial es alentadora, la nueva edición de nuestro informe Perspectivas de la transición energética mundial demuestra que la transición energética distan mucho de los niveles necesarios para evitar las graves consecuencias del cambio climático”, quien añadió que “la crisis energética que estamos viviendo en la actualidad es otra evidencia de que el mundo ya no puede depender de los combustibles fósiles para satisfacer su demanda energética (...) La energía renovable debe convertirse en la norma en todo el mundo”, por medio del impulso de la voluntad política para acelerar la ruta de 1,5 °C menos, esto se traduce en que el ritmo de crecimiento de las renovables debe ser superior al de la demanda energética para alcanzar los objetivos climáticos. 

Las regiones líderes en crecimiento en el uso de energías renovables fueron Asia (con 1,46 TW o 60 % de capacidad nueva), donde China agregó 121 GW, Europa (con 39 GW) y Norteamérica (con 38 GW), les siguen África (con crecimiento de 3,9 %) y América Central y el Caribe (con 3,3 %), en estas dos últimas regiones es necesario “reforzar la cooperación internacional para optimizar los mercados de la electricidad y destinar inversiones masivas a dichas regiones”, dijo Irena.

El crecimiento en la capacidad de generación energética solar general se resume en los siguientes números: África pasó de 10.789 MW en 2020 a 11.387 MW, en 2021; Asia pasó de 410.144 MW a 485.848 MW, en el mismo periodo; Centroamérica y el Caribe subieron de 2.791 MW a 3.276 MW, Eurasia aumentó de 8.230 MW a 9.704, Europa de 162.835 MW a 185.877 MW, Oriente Medio ascendió desde 7.473 MW a 8.411 MW, Norteamérica pasó de 84.067 MW a 105.878 MW, Oceanía creció desde 17.706 MW a 19.442 MW, y Suramérica registró un aumento de 12.753 MW a 19.649 MW.

Globalmente, la energía hidroeléctrica registró un crecimiento constante en 2021, gracias a la puesta en marcha de varios proyectos a gran escala; la energía eólica ceció menos de lo que lo hizo en 2020 (fueron apenas 93 GW en comparación con los 111 GW del año anterior), y la bioenergía se expandió para alcalnzar 10,3 GW (mientras en 2020 obtuvo 9,1 GW).