El almacenamiento de energía de larga duración (LDES) es vital para descarbonizar, equilibrar la oferta y demanda de energía, y mejorar la eficiencia de la red eléctrica. Ofrece costos potencialmente más bajos que las baterías de iones de litio, aumenta la seguridad energética y fomenta la innovación tecnológica.

La ecuación ha sido respaldada esta vez por la encuesta inaugural sobre costos de almacenamiento de energía de larga duración de BloombergNEF (BNEF) muestra que, si bien la mayoría de las tecnologías de almacenamiento de energía de larga duración aún se encuentran en una etapa inicial y son costosas en comparación con las baterías de iones de litio, algunas ya han logrado o están preparadas para lograr costos más bajos durante más tiempo. 

A través de una encuesta a siete grupos tecnológicos LDES y 20 tipos de tecnología, BNEF estableció que las tecnologías menos costosas ya proporcionan un almacenamiento más barato que las baterías de iones de litio durante más de ocho horas.

El almacenamiento de energía térmica y el almacenamiento de aire comprimido, por ejemplo, tuvieron un gasto de capital promedio, o gasto de capital, de $232 por kilovatio-hora y $293/kWh, respectivamente.

A modo de comparación, los sistemas de iones de litio tuvieron un gasto de capital promedio de 304 dólares/kWh para sistemas de cuatro horas de duración en 2023, generalmente a todavía más corto plazo, señala el estudio.

Para BNEF, la tasa de reducción de costos de las tecnologías LDES dependerá en gran medida de la expansión del despliegue y el desarrollo de rutas de acceso al mercado en las principales regiones.

La estimación que ofrece BNEF a partir de este primer estudio señala que el tiempo típico que tardan los activos de almacenamiento de energía en descargarse o cargarse aumentará en el futuro a medida que la tecnología desplace a los generadores de combustibles fósiles y se utilice para abordar las fuentes intermitentes de energía renovable.

“Las tecnologías LDES pueden agregar más almacenamiento de energía sin agregar más capacidad de conversión de energía, por lo que se las considera un competidor de las baterías de iones de litio. Aún así, es poco probable que los costos de los LDES caigan tan rápido como los de las baterías de iones de litio en esta década, ya que las baterías de iones de litio se utilizan ampliamente tanto en el sector del transporte como en el de la energía, y esta demanda reducirá el costo de la tecnología”, apunta el estudio.

La mirada en Asia

El informe también revela que, actualmente, las tecnologías LDES tienen más posibilidades de competir con las baterías de iones de litio en mercados no chinos, donde las baterías de iones de litio son más caras.

“Si bien los costos de las tecnologías LDES fuera de China son más altos, Estados Unidos y Europa tienen la oportunidad de invertir en sus propias industrias e impulsar la innovación y el despliegue. Los mercados fuera de China están desarrollando una gama más amplia de tecnologías en comparación con China, incluidos más tipos de tecnología dentro de baterías de flujo, aire comprimido, gas comprimido, térmica, gravedad y novedosas hidroeléctricas de bombeo. Hemos visto interés en esas regiones impulsado por ambiciosos objetivos de energía limpia, mayores costos de las baterías de iones de litio y un esfuerzo por desarrollar tecnologías alternativas que no dependan del litio”, concluyó Evelina Stoikou, asociada senior de almacenamiento de energía en BloombergNEF y coautora del informe.