República Dominicana ha sido un país icónico en el desarrollo de la energía eólica durante mucho tiempo dentro de la región del Caribe. Sin embargo, y como ha podido verse tras la celebración de Energyear Caribe 2023, ha habido un crecimiento muy significativo de la energía solar pero, por diferentes motivos, la energía eólica no le ha acompañado en la misma medida los últimos años, o por lo menos no en la misma línea en que había crecido en épocas anteriores.
Por ello, el debate sobre cuáles son los retos y desafíos del sector eólico en la zona es tan importante actualmente. El sector sí ve futuro en el desarrollo de la eólica, pero necesita un impulso de los actores públicos y condiciones que se adapten a sus particularidades específicas, que son distintas y más numerosas a las que se necesita para el desarrollo de la energía solar. “Para nadie es un secreto que la industria eólica tiene más retos que la energía solar. Y eso es un asunto de mercado. Actualmente, el país cuenta con más de 2.000 MW de proyectos solares y en constante desarrollo, y eso es porque hace unos años la energía solar se volvió mucho más competitiva que la energía eólica”, señaló Ricardo Estévez, gerente senior de Desarrollo de EGE Haina.
Algunos de esos retos pasan por el transporte, los costos, un marco regulatorio mejor definido para la eólica, los precios de la tecnología y los PPA y la precisión que necesitan este tipo de proyectos.
La precisión que necesita un parque eólico es uno de los puntos que ha frenado hasta el momento la expansión del sector en la región. “La energía eólica, además de ser difícil de desarrollar, es difícil de construir. La energía eólica necesita un lugar preciso. Tú puedes mover un parque solar 10 km; pero si mueves un proyecto eólico 100 metros, probablemente el factor de capacidad te puede bajar de un 40% a un 25%, e inmediatamente el proyecto se vuelve no factible”, comentó Estévez. Para Paola Pimentel, presidenta de MER-RD, el desarrollo de un proyecto eólico “requiere de ese nivel de precisión que lo hace tan específico, una serie de condiciones y circunstancias que tienen que darse para que el proyecto se pueda hacer con un cierre financiero que sea atractivo”.
Los problemas de precio y conexión también son desafíos a superar. “Los precios en los proyectos eólicos no han bajado. Al contrario, después de la pandemia hemos visto que han aumentado más de un 20-25%, y los precios de los PPA no han sufrido ese aumento. Sin embargo, en la energía solar sí mejoraron los precios. Tenemos esos ‘challenges’: de la parte económica, que los PPA no han subido, que el CAPEX ha aumentado, que los recursos no están en todos los sitios… y a eso vamos a agregarle que las redes ya están llenas. Ahora no hay lugares que no tengan suficiente presión de proyectos solares donde tú lo puedas interconectar” explicó Estévez, destacando que, aunque el camino es difícil, hay muchas posibilidades.
Para el gerente senior de Desarrollo de EGE Haina, el mayor reto de la energía eólica hoy en día es el precio del PPA, que debe de ser más competitivo. “Si tuviéramos PPA un poquito más altos estoy convencido de que, al igual que ha pasado con la energía solar, los proyectos aparecerían, pero lamentablemente con los precios de referencia que hay para la eólica es muy difícil cerrar los proyectos”. Por su parte, Pimentel considera también un reto importante no sólo el tema de los precios, sino la disminución del costo de la tecnología.
En cuanto al transporte, como indicó Estévez, “no es lo mismo transportar una pala de 50 metros como las de antes a las palas que están viniendo ahora de 80 metros. Por lo tanto, hay que buscar formas para ver cómo transportar esa palas”. Para Pimentel, es necesario que las autoridades también tengan un papel activo en este asunto: “Tenemos retos relacionados con el transporte y la municipalidad, porque para llevar esa pala tengo que afectar a muchas municipalidades y no todas entienden de qué se trata. Son cosas necesarias que hay que mencionar porque uno le pide apoyo al regulador. Es necesario flexibilizar ciertas cosas para que los proyectos eólicos, que deben tener en cuenta muchísimos parámetros adicionales a los que tiene el solar, puedan caminar y puedan desarrollarse de manera mucho más ágil”.
Esto entraría dentro del reto regulatorio. Estévez añadió también los límites de los parques eólicos. “Por ejemplo, los parques eólicos solamente pueden ser de 50 MW, por lo cual hay que hacer concesiones y es el doble de trabajo si se quiere hacer un parque de 100 MW”, añadió.
Además, hay otros desafíos que añadir. “En el caso de la eólica los retos son mucho más grandes que en la solar porque la eólica es muy específica. Nos enfrentamos con situaciones inmobiliarias; nos enfrentamos con situaciones relativas a los estudios ambientales, que a pesar de que la tecnología eólica se sugiere como menos invasiva, requieres otro tipo de estudios y requieres que la regulación sea más especializada en evaluar realmente ese impacto de la eólica”, explicó Pimentel.
La diversificación de la matriz puede traer un futuro prometedor
A pesar de los numerosos desafíos que el sector tiene por delante, para la presidenta de MER-RD el sector eólico está muy cerca de volver a tener un repunte nuevamente, porque la energía eólica permite diversificar la matriz y que se pueda hibridar con la energía solar. “Hay que pensar en eólico, tener la manera de concentrar mi solución no solamente en temas solares, sino en incorporar tecnología eólica que me va a permitir poder diversificar la matriz y poder inyectar renovable en otro momento, como por ejemplo la noche. La característica de viento de Dominicana indica que hay mucho potencial porque hay una buena generación durante la noche, lo que permite ir moviéndose y pensar en hibridar”, explicó.
Sumándose a este optimismo, Héctor Herrera, gerente de Operaciones de Inproca, coincide en que la eólica permite esa diversificación de la matriz. “La República Dominicana tiene un perfil muy equilibrado. Tenemos mucha capacidad de generación eólica en una zona a ciertas horas, que es totalmente opuesto en la otra zona de alto potencial eólico”, comentó, remarcando que la tecnología ha ayudado a que las áreas óptimas para la energía eólica aumenten: “El aumento de la tecnología de los aerogeneradores ha hecho que el área de posible generación eólica sea mucho más amplia que hace 11 años, cuando salió el informe de los 78 puntos de alto potencial eólico”.
Finalmente, para Marco Zazzini, gerente técnico de Anabática, este panorama que se presenta en República Dominicana con los desafíos de la energía eólica es muy transversal a todos los mercados de Latinoamérica, por lo que hay que aprender de los errores pasados: “Es algo que está sucediendo sistemáticamente en Chile, Argentina, Perú o Colombia, donde los desafíos empiezan a ser cada vez mayores. Hay que empezar a empujar otros factores que nos ayuden a llegar a esos lugares con cierta posibilidad de desarrollo. Comparto el optimismo y debemos de trabajar para no cometer los mismos errores que se cometieron en otros mercados, aprovechando todo lo que se fue aprendiendo en el mundo para el sector eólico”.
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