En un paso crucial hacia la descarbonización industrial, BP e Iberdrola España han anunciado la decisión final de inversión para el desarrollo de un ambicioso proyecto de hidrógeno verde en Castellón, que será la mayor planta de su tipo en España. Este proyecto de 25 MW es el primer esfuerzo conjunto de ambas compañías, bajo la empresa Castellón Green Hydrogen S.L., creada en partes iguales.

El hidrógeno verde producido en esta planta se destinará a la refinería de BP en Castellón, contribuyendo a la reducción de emisiones de CO2 a partir de 2026. Se espera que la planta ayude a evitar la emisión de 23.000 toneladas de dióxido de carbono anuales, lo que equivale a retirar 5.000 coches de circulación en ese mismo periodo. El proyecto, que también creará hasta 500 nuevos empleos durante su construcción, se ha beneficiado de una financiación de 15 millones de euros procedentes del Plan Español de Recuperación, Transformación y Resiliencia, apoyado por los fondos NextGenerationEU de la Unión Europea.

Colaboración estratégica para la transición energética

Felipe Arbelaez, vicepresidente senior de hidrógeno y Captura y Almacenamiento de Carbono de BP, destacó la importancia de este proyecto para su estrategia de hidrógeno: “Esta decisión es un importante paso adelante para nuestro negocio de hidrógeno. Nos centramos en los mejores proyectos que puedan crear valor adicional a través de la integración y cumplir con nuestros objetivos de inversión".

Por su parte, Millán García-Tola, director global de Hidrógeno en Iberdrola España, reafirmó el compromiso de su empresa con el hidrógeno verde como una herramienta clave para la descarbonización. "Esta planta convertirá 200 GWh al año de energía renovable en hidrógeno verde, un paso más en nuestra apuesta por liderar la transición energética en la industria", aseguró.

El electrolizador de 25 MW que alimentará la planta utilizará tecnología de membrana de intercambio protónico (PEM) y será alimentado por energía renovable suministrada a través de un acuerdo de compra (PPA) con Iberdrola. Con una capacidad para producir 2.800 toneladas anuales de hidrógeno verde, este proyecto permitirá a la refinería de Castellón reemplazar el hidrógeno gris actual, producido con gas natural, por hidrógeno verde, cumpliendo con los requisitos europeos de combustibles renovables de origen no biológico (RFNBO).

Además del impacto medioambiental, el proyecto también tendrá repercusiones en la economía local, con la creación de 500 empleos directos durante la fase de construcción y la posibilidad de expandir la capacidad en el futuro, lo que también permitiría utilizar el hidrógeno verde en otras industrias clave de la Comunidad Valenciana, como el sector cerámico o el transporte pesado.

Un ejemplo de colaboración público-privada

El proyecto también refuerza la cooperación entre el sector privado y las instituciones públicas. En julio de 2024, BP firmó una carta de intenciones con el Gobierno Valenciano para fortalecer la región como líder en la transición energética. Según Olvido Moraleda, presidenta de BP Energía España, "Este proyecto no solo transforma nuestras infraestructuras, sino que fortalece el tejido económico y la capacidad industrial de la Comunidad Valenciana".

Alianzas clave en la transición energética

El anuncio de esta planta de hidrógeno verde es solo una parte de las recientes alianzas estratégicas de Iberdrola España en la transición energética. La compañía ha firmado acuerdos con BP para instalar 11.700 puntos de carga rápida en la península ibérica y ha cerrado otras alianzas internacionales para impulsar proyectos renovables y de hidrógeno.

El futuro del hidrógeno verde parece prometedor en España, y este proyecto en Castellón es un ejemplo clave de cómo la colaboración entre empresas y gobiernos puede impulsar una transformación industrial hacia un modelo más sostenible.