Naturgy puso hoy la primera piedra de las dos primeras plantas fotovoltaicas que la multinacional energética va a construir en Andalucía. Ambas instalaciones, Tabernas I y Tabernas II, tiene, una potencia de 50 MWp cada una y producirán conjuntamente más 228 GWh/año de energía, lo que equivale al consumo eléctrico anual de 65.400 viviendas, estas infraestructuras permitirán desplazar el uso de otras fuentes de generación eléctrica convencional y contribuirán a reducir más de 145.200 toneladas de CO2 al año, adicionalmente a otras emisiones contaminantes.

“La plena disposición de la Junta de Andalucía al desarrollo de todos los proyectos de generación de energías renovables, como es tales y bajo el marco de la Estrategia Energética de Andalucía actualmente en elaboración, así como el Plan Andaluz de Acción por el Clima aprobado el pasado 13 de octubre”, comentó Manuel Larrasa,director general de Energía de la Junta de Andalucía.

"Esta comarca se va a convertir en los próximos años en líder en la producción de energías renovables. Todos los proyectos que se están implantado pasan por estrictos requisitos en materia medioambiental, pero también reclamamos la generación de empleo local y una serie de compromisos con este entorno, con el patrimonio y la formación para que sigamos avanzando", manifestó José Díaz, alcalde de Tabernas. 

“Para la compañía a la que represento hoy es un día importante pues ponemos la primera piedra de las dos primeras plantas fotovoltaicas que Naturgy construye en esta Comunidad Autónoma, reforzando así nuestro compromiso con Andalucía”, comentó Juan Ferrero, responsable de Desarrollo de Proyectos de Naturgy.

La construcción de estas plantas fotovoltaicas, que tiene una inversión prevista de más de 52 millones de euros, permitirá la creación de más de 700 puestos de trabajo tanto directos como indirectos durante las fases de construcción, operación y mantenimiento.

Los proyectos de las plantas fotovoltaicas Tabernas I y II se han diseñado teniendo en cuenta su adecuada integración ambiental y paisajística. Prueba de ello es la gran variedad de medidas ambientales preventivas y compensatorias que se llevarán a cabo, tales como reforestaciones en parcelas con escasa cubierta vegetal natural; medidas agroambientales para favorecer el hábitat de las aves esteparias, con siembra anual de cereal; la construcción de comederos y bebederos para la fauna; majanos para repoblación con conejo de monte y cajas nido, colmenas y refugios para insectos, entre otras acciones.