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Archivo ACEA - Sigrid de Vries

ACEA presenta manifiesto para dirigir la transición hacia vehículos eléctricos y mantener la competitividad global


A través de un comunicado, la Asociación de Constructoras Europeas de Automóviles (ACEA), ha publicado el manifiesto #FutureDrive, el cual describe cambios de políticas y acciones colaborativas para abordar los desafíos globales en medio de la transición de los vehículos eléctricos. Mientras las piezas del tablero geopolítico se mueven, y con elecciones cruciales en la UE a la vuelta de la esquina, el manifiesto de ACEA sirve como un plan estratégico para lograr una movilidad sostenible para todos.

Según ACEA, en el período previo a las cruciales elecciones europeas de junio, industrias de diversos orígenes están revelando sus manifiestos con la esperanza de despertar el interés de los nuevos legisladores europeos. La colaboración con la próxima generación de líderes de Europa nunca ha sido más importante para abordar desafíos compartidos, ya que ellos controlan tanto la pluma como el dinero que definirá la dirección estratégica de la UE en las próximas décadas.

De acuerdo con el manifiesto, estas próximas elecciones de la UE pueden ser las más cruciales en la memoria moderna para Europa. El mundo ya no es el lugar que era hace apenas una década, y el lugar de Europa como principal jugador que coloca las piezas del tablero de ajedrez global ya no puede darse por sentado. Mientras el europeo promedio soporta cada vez más el peso de la creciente inseguridad económica y los mayores costos domésticos, están aumentando los informes de una inminente reacción contra la regulación verde en las urnas.

Para ACEA, Europa ha buscado durante mucho tiempo ser un campeón de la sostenibilidad, estableciendo reglas ambiciosas con la expectativa de que otros las seguirían, sentando un punto de referencia global para la regulación. Sin duda, esto ha tenido cierto éxito, ya que otras regiones importantes a menudo siguieron el ejemplo de Europa, lo que dio lugar a una serie de regulaciones internacionales basadas en el modelo europeo.

Otro de los puntos destacados del manifiesto es la importancia de la regulación efectiva, como se ha demostrado en el fortalecimiento y la profundización del mercado único. Actualmente, más de treinta regulaciones diferentes rigen el transporte en Europa, y el documento argumenta que una regulación inteligente puede beneficiar a las empresas y contribuir a la construcción de un mercado único más sólido.

La transición hacia vehículos eléctricos es un componente esencial para combatir el cambio climático, según el manifiesto, pero se destaca la falta de una estrategia industrial clara en Europa para respaldar esta ambición. La transformación sin precedentes del motor de combustión hacia la electricidad a batería plantea la necesidad de desarrollar nuevas cadenas de valor, un desafío que Europa aún no ha abordado completamente.

El manifiesto subraya la presión creciente sobre la industria automotriz europea debido a la competencia global, el aumento de los costos empresariales, el proteccionismo y los cambios en el panorama geopolítico. Ante estos desafíos, los fabricantes de automóviles europeos proponen una hoja de ruta colectiva y un plan de acción para dar forma al futuro de la movilidad, en colaboración con responsables políticos y clientes.

Los fabricantes sostienen que la industria automotriz está profundamente entrelazada con la sociedad europea y desempeña un papel esencial en la vida diaria de los ciudadanos. Desde el transporte diario hasta el soporte vital para las PYME, los vehículos producidos en Europa juegan un papel fundamental. El manifiesto destaca que la industria no solo da forma a la regulación, sino que también busca construir una movilidad sostenible para todos los europeos, manteniendo al mismo tiempo la competitividad global.

En un llamado a la acción, el Manifiesto #FutureDriven busca concienciar sobre la importancia estratégica de la industria automotriz europea, destacando su impacto en el empleo, el crecimiento económico y el superávit comercial. La iniciativa apunta a movilizar a diversos actores, desde responsables políticos hasta clientes, para garantizar que Europa continúe liderando el camino en la movilidad sostenible y la innovación en la industria automotriz.

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