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¿Existen brechas de género en el sector energético europeo?


La Agencia Internacional de la Energía (IEA, por sus siglas en inglés), dio a conocer datos que revelan el grado de sesgo de género que existe en el sector energético, un sector que, según la Agencia, ha carecido de diversidad de género desde su creación y que actualmente está haciendo esfuerzos considerables para cambiar este desequilibrio.

El informe, que cubrió Austria, Francia, Alemania, Portugal y España, encontró significativamente menos mujeres trabajando en el sector energético en comparación con los hombres. En términos relativos, la brecha es más del doble que en el caso del sector no energético. Además, afirmó que los salarios de las empleadas son casi un 20% más bajos que los de los hombres, siendo la brecha algo mayor que en las empresas no energéticas.

Promedio de salarios de género y brechas de empleo por sector

Fuente: IEA

Según la IEA, la brecha salarial permanece aproximadamente igual cuando se tienen en cuenta los efectos de la composición de habilidades en términos de capacidad, educación y experiencia potencial, lo que indica que la brecha no es una función de las diferencias de género en los niveles de habilidades dentro de las empresas.

También comparó la importancia de las brechas salariales para las diferentes edades de los empleados. Según el informe, existe una brecha salarial de género generalmente creciente con la edad, tanto para las empresas energéticas como para las no energéticas, entre los trabajadores de 40 años o menos. Sin embargo, en el sector energético la brecha salarial de género sigue aumentando con la edad hasta casi los 50 años.

Algunas conclusiones revelaron que las tasas de empleo de mujeres relativamente bajas en las empresas de energía y la concentración de mujeres en empresas y ocupaciones de salarios bajos subrayan la importancia de garantizar que las prácticas de contratación y promoción en el sector sean imparciales. En particular, los hallazgos sugieren una falta de movilidad profesional y avance para las mujeres en trabajos de energía en comparación con los de otros sectores, lo que afectará tanto la atracción como la retención de una fuerza laboral diversa.

Según el documento, “si las mujeres no avanzan en el sector energético, habrá menos modelos femeninos y mentores para atraer a más mujeres”. Diferencias de especialización entre hombres y mujeres se puede explicar principalmente por las normas y expectativas de género, que se ven reforzadas por la falta de modelos femeninos a seguir.

Por lo tanto, para la IEA, las medidas adoptadas para garantizar la transparencia y la equidad en la contratación y la evaluación del desempeño contribuirán tanto a atraer como a retener a más mujeres en el sector energético. La capacitación corporativa sobre el sesgo de género inconsciente, particularmente entre los gerentes, también puede desempeñar un papel importante en el establecimiento de prácticas de contratación equitativas y evaluaciones de desempeño.

El informe identificó que todas las barreras tienen un impacto negativo en las brechas salariales de género y las trayectorias profesionales. Estos hallazgos son en consonancia con las de otros sectores que históricamente han empleado mayoritariamente a hombres y que también se enfrentan al reto de retener a las mujeres.

 

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